jueves, 12 de agosto de 2010

040 CÁPSULA CIENCIA Y CONCIENCIA

image 12 DE AGOSTO DE 2010 SOBRE LA PARTIDOCRACIA (2 de 3 partes)
Por Antonio Silva Tavera

image En la cápsula del 15 de julio comentábamos sobre la partidocracia en México, tema que dejamos inacabado porque hicimos una pausa debido a que fue oportuno hablar sobre la celebración de Santiago Apóstol que se avecinaba y sobre el tema de las Cabañuelas como consecuencia de los verdaderos diluvios que nos han caído en esta temporada. Hemos de retomar el tema ahora.
En la ocasión anterior vimos que todas las encuestas de opinión, sin excepción, consideran a los partidos políticos, a todos y también sin excepción, como las instituciones que menos confianza le generan, abajo y ya lo decíamos entonces, de instituciones que tradicionalmente siempre habían ocupado tan vergonzoso sitio como los diputados y los cuerpos policiacos. También tocamos el tema de las alianzas debido a que es interesante desde los puntos político-electorales como desde los ético-ideológicos. Y concluíamos que el unirse electoralmente no es por sí mismo incorrecto o malo, ni aun cuando los partidos aliados sean de corriente adversa. Y pusimos ejemplos a nivel local e internacional en donde eso se ha dado y ha sido plausible el resultado para los ciudadanos y para la democracia. Comentábamos que tampoco era la primera ocasión que el PAN y el PRD iban juntos en alianza en pos de gubernaturas, diputaciones y alcaldías y que al igual que en ese entonces, los resultados no fueron para nada malos, electoralmente hablando. La diferencia es que ahora surgieron voces disidentes en contra de la alianza tanto dentro del PAN como del PRD y fuera de ambos partidos. Pareciera que toda esa estridencia hubiera sido orquestada. Y pareciera que quien lo hubiera hecho fuera el PRI, partido que se veía perjudicado por esa coalición electoral.
Los partidos políticos, nos guste o no, son elementos imprescindibles en la democracia representativa moderna, pues ellos debieran ser los principales articuladores y aglutinadores de los intereses sociales. Históricamente, han sido precedidos por uniones, facciones, cofradías y hasta grupos de interés, que hacían la vez de partido político en el S. XIX. En México podemos hablar de las logias masónicas, la Yorkina y la Escocesa, como antecedentes directos del actual sistema de partidos políticos ya que dominaron el ámbito de acceso al poder hasta ya entrado el siglo XX. A muchos personajes históricos relevantes se les asocia con los masones: Presidentes de la república y Ministros, Industriales y Banqueros, Escritores y Periodistas.
Los partidos políticos, a diferencia de las facciones, permiten que se expresen tanto los intereses nacionales como los particulares, ya que al existir en diferentes tendencias y signos, impiden que los intereses particulares dominen por entero a los nacionales. Algo que es bueno pues su función es indispensable en una sociedad plural en la que los distintos grupos e intereses requieren de participación y representación. Lo peligroso es el partido único, que generaliza falsamente los intereses particulares. Los partidos cuando compiten políticamente en igualdad de oportunidades, con el terreno parejo para todos, son los mejores catalizadores, propiciadores y garantes de la democracia.
Duverger clasifica a los partidos conforme al sistema en que se insertan. Distingue entre sistemas de partido único, bipartidistas y multipartidistas.
El célebre politólogo italiano Giovanni Sartori propuso la siguiente clasificación: de partido único (Albania y Cuba); partido hegemónico (México durante el PRI); partido predominante (Japón y Suecia); bipartidismo (los Estados Unidos y el Reino Unido); pluralismo moderado (Alemania y los Países Bajos); pluralismo polarizado (Italia) y atomización (que es un “sálvese quien pueda” como en Malasia).
En la siguiente y última entrega veremos cuáles son las funciones primordiales de los partidos y qué nos están quedando a deber.
Me despido en un, dos, tres:
Uno, la frase. Los partidos son el paraíso de los charlatanes, quienes dominan el arte de obtener el dinero de los ricos y el voto de los pobres con el pretexto de proteger a los unos de los otros. Frase inspirada en George Bernard Shaw.
Dos. Lo invito a que visite en internet el sitio www.valledesantiago.org.mx y
Tres. Eso es todo. Ciencia y conciencia para un mejor mañana. Nos vemos el jueves próximo. Hasta ese entonces. Gracias.