jueves, 20 de mayo de 2010

030 CÁPSULA CIENCIA Y CONCIENCIA

LA CIUDAD DESTRUIDA
20 DE MAYO DE 2010
CASA DEMOLIDA JUÁREZ - 2010
Las ciudades tienen un legado histórico-cultural que deben de preservar. Es la única manera que tienen de reconocerse. Es la única forma de reflejarse en su pasado. De entre los más importantes legados histórico-culturales encontramos la herencia arquitectónica. Esto es porque los edificios antiguos relatan a las generaciones pasadas en sus aspiraciones, con sus creencias y sus gustos. A través de las edificaciones podemos aproximarnos seriamente a las sociedades que nos antecedieron. Los edificios antiguos, los que tienen arte e historia guardados entre sus muros, tienen su dignidad sin duda y demolerlos es cancelar definitivamente la oportunidad de enorgullecerse de nuestro pasado común, de admirarlos en su intimidad compartida o de escucharlos en sus muchas historias vividas.
Ahora bien, alguien no podría estar de acuerdo. Alguien podría preguntarse ¿si esta casa es mía por qué no he de hacer lo que yo quiera con ella? La respuesta es que nadie objeta la legalidad de su propiedad, es tan suya como los calcetines que trae puestos. Lo que no es atribución de los propietarios sino facultad de la autoridad es el uso. Y tiene una razón fundamental para que esto así sea ¿estaría, por ejemplo, usted de acuerdo que el propietario de la casa vecina, la de al lado, tan dueño legal de su finca como usted es de la suya, usara su propiedad para instalar una zahúrda? O, generalizando ¿estarían de acuerdo los vecinos de su calle en que se colocara un centro nocturno en el rumbo? Luego entonces, siguen siendo tan propietarios de su inmueble todos los que legalmente lo acrediten pero no de usarlo como quieran y en lo que quieran. Destruir el patrimonio arquitectónico camina por ahí y va de la mano con que nadie puede desaparecer el legado histórico de toda la comunidad y que la autoridad está obligada a preservarlo.
Esta obligación es debida a que es de utilidad pública, la investigación, protección, conservación, restauración y recuperación de los monumentos arqueológicos, artísticos e históricos y de las zonas de monumentos.
La ley es muy clara al respecto, si es una edificación del siglo XIX o del siglo XX que además esté catalogada o que pertenezca al centro histórico o que tenga una declaratoria de interés público por su carácter artístico, histórico, referencial o de conjunto corresponde a la Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos.
La atribución para hacerla cumplir recae directamente en el Instituto Nacional de Antropología e Historia o INAH por sus siglas pero, y mucha atención aquí, contando con la coordinación de las autoridades estatales y municipales.
En Valle de Santiago hemos vivido una constante destrucción de nuestro patrimonio inmobiliario cultural, artístico e histórico. Destrucción que desafortunadamente se ha acelerado en los últimos meses. Aunque no exista, hasta donde sé, una declaratoria que delimite lo que es el centro histórico, zona que usualmente cuenta con la máxima preservación, ello no obsta para que se preserve nuestro legado como la ley tácitamente señala.
Destruir el pasado de nuestros abuelos no habla bien de nuestra sociedad. Lo que es patrimonio inmobiliario nos pertenece a todos porque pertenece a nuestra historia.
Aún más allá de lo que la conservación del patrimonio edificado signifique para cada uno de nosotros, lo importante es ensalzar las oportunidades que abre, incluso a los políticos, quienes están obligados a evitar acabar, con sus desaciertos, con nuestra herencia cultural edificada y permitirnos cumplir con el deber de tener algo que heredar a las nuevas generaciones.
Me despido en un, dos, tres:
Uno, la frase. Hay un refrán italiano que dice “Quien regresando a su pueblo después de una ausencia larga no encuentra su portal, su plaza y su árbol, no regresó nunca”.
Dos. Lo invitamos a que lea el blog de estas cápsulas en valledesantiago20.blogspot.com y a que visite www.valledesantiago.org.mx y
Tres. Eso es todo. Ciencia y conciencia para un mejor mañana. Nos vemos el jueves próximo. Hasta ese entonces. Gracias.